domingo, 13 de junio de 2010

Máquina de coser

Hace muchos, pero muchos años yo cosía. Hacía especialmente ropa para lu, mi hijita pequeñita. Nunca le acabaron de gustar los vestidos que yo le hice, no sé si eran muy calurosos, no se si ella era muy práctica, no sé.
Yo de todas maneras cosía y cosía. Mi primer vestido fue uno negro, halter, largo. No tendría ni 17 años cuando lo hice. La gente no me creía que yo misma, que yo mismísima lo hice con mis manitas.
Hice faldas, blusas, un saco blazer de mezclilla, setentero, tipo patchwork, hice fundas, sabanas, hice secadores, hice cuanta cosa se me ocurrió. Un día se me agotó la paciencia, un día ya no tuve tiempo, y dejé de coser.
Esporádicamente hacía algo. Recuerdo cuando mamá y yo hicimos un delantal. Las dos nos reímos hasta que se nos salieron las lágrimas porque el delantal me quedó "esgado". Ricardo dice que se debe decir sesgado, pero cuando es un asunto de costura, así, caserón, para nosotras es esgado y punto.
En fin, que ahora dispongo de un poco de tiempo y he retomado la costura. Solo he hecho dos cosas, una es una bolsita, con zipper, y la otra es un juguetito para Manuela, un elefantito.
Vamos a ir a Chicago a conocer a Manuela, por eso le hice el elefante. Nos iremos el sabado 19 y la voy a abrazar y a olisquear, seguro huele rico... me encanta como huelen los bebés, en su cuellito se guarda un olor infinitamente vívido... infinitamente amoroso..


No hay comentarios: